lunes, 20 de octubre de 2014

El empleo entre los jóvenes de Málaga toca fondo tras perder el 52% de afiliados

Un informe del SEPE constata que Málaga registró en 2013 las cifras más bajas de afiliación y contratos de toda la crisis - Camareros, dependientes, comerciales y peones agrícolas encabezan la lista de ocupaciones más contratadas, con más de un 95% de trabajo temporal

Empleo describe un panorama laboral «reducido» pero cree que 2014 será ya el primero de una tendencia al alza
La crisis económica se ha cebado especialmente con el colectivo de los jóvenes, que en los últimos años han visto reducidas al mínimo sus posibilidades de encontrar empleo y, en caso de hallarlo, lo hacen en más del 95% de los casos con contratos temporales, la mayor tasa que se recuerda en la provincia de Málaga. Según el último Informe sobre el Mercado de Trabajo de los Jóvenes (personas menores de 30 años) publicado por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), la situación laboral en Málaga tocó fondo en 2013, con un descenso acumulado del 52% de jóvenes afiliados a la Seguridad Social desde el año 2006. Si antes de la crisis, el mercado fue capaz de dar empleo a 155.219 jóvenes malagueños, el pasado año la cifra cayó a un mínimo de 75.134 personas, la cifra más baja recabada por el SEPE en sus informes. De esta forma, los menores de 30 años, que durante la época del boom económico llegaron a representar un 25% de los ocupados en la provincia, suponen ahora sólo el 15% del total de trabajadores.
«Las posibilidades de trabajo existentes para el colectivo se han visto bastante reducidas», constata el SEPE, que sin embargo opina que «todo parece indicar que se ha llegado a mínimos y que la tendencia será al alza» a partir de este 2014. El estudio revela que la contratación en Málaga de personas del colectivo también ha bajado desde los 341.292 contratos del 2006 hasta los 183.850 de 2013, con una caída superior al 46%.


Hostelería y comercio, líderes
El sector más damnificado es, por supuesto, el de la construcción, que sigue perdiendo peso año a año: de contratar a casi 75.000 jóvenes en Málaga hasta antes de la crisis ha pasado a dar cobijo tan sólo a 9.800 personas el pasado año. El baluarte laboral de la provincia, por contra, sigue siendo el sector servicios, que concentra el 80% de los contratos que firman los jóvenes malagueños.
De hecho, la hostelería y el comercio son las actividades líderes en contratación de jóvenes en Málaga, concentrando alrededor de un tercio de los contratos realizados en 2013 en la provincia. Lógicamente, los meses de verano y la campaña de Navidad son las épocas de mayor contratación. Los puestos más demandados son los de camareros (32.735 contratos), dependientes en tiendas (16.676), personal de limpieza en hoteles y oficinas (7.665) o monitores de actividades recreativas (4.979). Los datos del estudio revelan que otro apartado importante para el empleo juvenil son las campañas agrícolas: el pasado año se firmaron más de 14.000 contratos de peones del campo.
Paro entre los jóvenes
Sin embargo, el predominio del sector servicios en la economía malagueña hace que este segmento concentre también a la mayoría de jóvenes malagueños que están en el desempleo, en concreto, a casi el 60% de los 40.000 parados mensuales menores de 30 años que de media tuvo Málaga durante el pasado año. La preocupación del SEPE también se centra en el grupo de jóvenes en paro que más ha aumentado desde 2009: se trata del colectivo de personas sin empleo anterior. Es decir, los jóvenes que acaban de incorporarse el mercado laboral y que no encuentran ninguna posibilidad de inserción. La cifra aumentó un 9,62% en 2013 y rebasa ya las 10.500 personas, más del doble que la registrada antes del inicio de la crisis. El SEPE apunta que este grupo «presenta una clara tendencia al alza, debido a que el mercado de trabajo no tiene aún la suficiente capacidad para absorber a dicho colectivo».
Los sindicatos vienen alertando desde hace meses de que los jóvenes son los que más están pagando la máxima precarización que ha alcanzado el mercado de trabajo. Según reiteran CCOO y UGT, el perfil del empleado medio en Málaga es el de un trabajador de la hostelería con contrato a tiempo parcial, que muchas veces enmascara de forma fraudulenta jornadas laborales completas. «Estamos asistiendo a un aumento de la economía sumergida», lamentan.

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